Recuerdo
los cálidos amaneceres
acariciando tu cabello
formado por rayos de sol.
Recuerdo,
rescatarte con mis brazos
de terribles pesadillas
y calmar tu respiración.
Recuerdo,
recogerte en días de lluvia
taparte con mi abrigo
y entregarte mi calor.
Recuerdo,
el horizonte de tu mirada,
tu sonrisa entre arena y sal,
cada latido de tu corazón.
Recuerdo,
aquellas flores que hoy duermen
en tus libros, y cuentan historias
sobre el significado del amor.
Recuerdo,
secar con mis dedos tus lágrimas,
y dibujar hoy con las mías
los versos de mi interior.
Recuerdo,
la sede de la justicia,
el verde y luminoso triunfo
donde todo se originó.
Recuerdo
cada día recordarte,
acordarme del recuerdo
donde acordé no olvidarte.
Recuerdo,
tan nítidamente que
pareciera que en tu regazo,
tan dulce, aún duermo.
Recuerdo...
Que no quiero
que te conviertas en un recuerdo...
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