¡Ya era hora!

¡Ya era hora! Después de más de cuarenta años de democracia por fin sacamos al dictador (o "general Franco" como dirían los de Vox) de aquel mausoleo construido con el sudor y la sangre de miles de presos políticos esclavizados. Ha llegado tarde pero ha llegado. Aunque ya saben lo que se dice: las cosas de palacio van despacio. A modo de curiosidad, según el historiador Juan Pablo Fusi, fueron 20000 los presos políticos que se utilizaron para construirlo. Aunque bueno, ojalá todo lo malo de la dictadura hubiese sido eso. No nos olvidamos de los familiares perdidos en cunetas y fosas comunes, de las personas que murieron en los campos de concentración, ni de aquellos artistas ilustres de España cuyas luces fueron apagadas en nombre de la tiranía.  

En cuanto al acto en sí, se pudo apreciar cierta solemnidad en el ambiente. Los familiares pudieron cargar con el féretro dando una imagen de normalidad, incluso de "heroísmo" si me apuran, a un suceso que debería haberse llevado a cabo con la mayor contundencia posible, sin evitar espectáculos innecesarios. Tampoco diré, como he visto por ahí, que fuese un homenaje por parte del Gobierno, eso me parece una barbaridad y carece de sentido. Lo cierto es que habría sido más apropiado llevarlo a cabo de otra forma o, al menos, haber tomado acciones legales por la exaltación de la figura del dictador y la exposición de simbología fascista por parte de la familia.

La verdad es que parece como si toda esta ideología estuviese normalizada por parte de la sociedad y las autoridades. A pesar de que el fascismo está en auge en nuestro país, y de que los grupos que lo defienden suelen cometer actos violentos, se actúa con total pasividad por parte de las autoridades del Estado. No hay consecuencias para quienes coreaban el nombre de un golpista como Tejero. No hay consecuencias para aquellos que proferían insultos contra ministros del gobierno y periodistas, así como tampoco las habrá para el hombre que agredió a un periodista de La Cuatro (dejo el enlace al final del post). No entiendo porqué la policía no actúa con la misma contundencia que en Cataluña ante este tipo de actos deplorables. 

Pero, sin duda, lo más divertido de estos días ha sido escuchar las excusas que la extrema derecha de Vox ha puesto para no apoyar la exhumación del dictador (como si no supiéramos ya de qué palo van). Primero hablaron del derecho de la familia a decidir dónde enterrar a sus difuntos, como si el difunto en cuestión fuese otro cualquiera o no se hubiese hecho de acuerdo a la ley, a pesar de existir sentencia del Tribunal Supremo. Después hablaron del inútil coste que supondría a los españoles la exhumación del dictador. Pues bien, según se calculó antes de que se llevase a cabo la exhumación, el coste sería de 65000 €. Si dividimos esta cantidad entre el número de habitantes de nuestro país, cada uno saldríamos a pagar una cantidad aproximada de 0,001382 €. Si con este precio reparamos la dignidad democrática de nuestro país, me parece que nos sale bastante rentable soltar la 'calderilla'. Por último, en una entrevista para el ABC, el líder de Vox declaró que no estaba de acuerdo con la exhumación porque lo veía "inadecuado", sin exponer más motivos. Ese día Santiago Abascal se sentía muy cómodo y cuando le preguntaron si no temía ser considerado por ello un "nostálgico del franquismo" él respondió literalmente "No nos preocupa. Nosotros somos cercanos a la libertad para opinar sobre historia. Estoy seguro de que hay gente en Vox crítica con el franquismo, otros que no tienen una posición sobre el franquismo y otros que defienden la obra de Franco. Todos tienen cabida en Vox, porque nosotros no decimos a los españoles qué es lo que tienen que pensar sobre el pasado”. Volvemos a lo de antes, ¿qué pasaría si en un país como Alemania un partido reconociese abiertamente que los que defienden la obra de Hitler tienen cabida en su partido? Impunidad y más impunidad. Además, estas declaraciones no solo son condenables por su contenido en sí, sino por su enorme hipocresía. Si es verdad que en Vox no dicen qué pensar a los españoles, ¿por qué han eliminado junto con el PP y C's en Andalucía, el libro de "Los Girasoles Ciegos " de Alberto Méndez, que habla sobre el terror de la represión franquista, de las lecturas obligatorias de Bachillerato?

Como vemos, todavía nos quedan muchas reformas por emprender. No basta con sacar al dictador del mausoleo, deberíamos inhabilitar el Valle de los Caídos como lugar turístico o al menos cambiar el significado que actualmente tiene. Por otra parte, nos encontramos en plena crisis política, con otra repetición electoral en menos de cuatro años, crisis territorial, por lo ocurrido en Cataluña, y quién sabe si pronto, económica. La confianza en las instituciones democráticas y en la clase política ha decaído en el sentir general de la gente. Se respira un ambiente de indignación y hartazgo. Tal y como hemos observado, hay partidos que cuestionan los pilares básicos de esa democracia que tanto nos ha costado construir. Sin embargo, la democracia no es un significante vacío, está acompañada de valores (libertad, igualdad, solidaridad). Necesitamos defender esos valores y crear mecanismos que garanticen su defensa, con respeto al pasado y a nuestra memoria histórica. Solo así quizás podamos pasar de 'democracia' a 'democracia plena'. 
                                                                                                                                 - Chakal

Enlaces:

Bienvenida a Tejero e insultos a ministros (pinchar para acceder al vídeo)

Agresión a periodista de La Cuatro (pinchar para acceder al vídeo)